Más que una tradición, el pan se ha convertido en un medio de innovación a través de los distintos implementos y desarrollos de la tecnología, llegando a totalizar se en una cantidad aproximada de 315 tipos de pan a nivel mundial, entre los que podemos incluir al delicioso pan de ajo.
Caracterizado por ser excelente acompañante en todas las comidas, este pan resulta de gran nutrición y complemento para disfrutar a cualquier hora del día, por lo que te traemos una excelente receta para que aprendas a hacer pan de ajo desde la comodidad de tu hogar.
Con un excelente valor nutricional, podrás disfrutar de un buen pan y de sus propiedades beneficiosas para la salud, mientras te deleitas con una excelente combinación del sabor único que tiene para ofrecer el ajo. Y con esta receta, puedes ponerlo en práctica desde casa.
Sin importar la ocasión, El pan de ajo puede convertirse en el aperitivo de la fiesta o de una reunión, haciendo que todos disfruten de su maravilloso sabor y que lo conviertan en el centro de atención de la mesa de aperitivos, siendo fácil de preparar y muy rápido.
El secreto de hacer un buen pan de ajo
El verdadero truco de esta receta es, elegir un pan de buena calidad que no sea muy grueso, como el baguette. Además, seleccionar una mantequilla que sea de excelente calidad y pueda proveer al pan un excelente sabor, dándole el toque esencial de la mantequilla.
Receta pan de ajo
Aunque la cantidad de ajo utilizada para esta combinación es al gusto, se recomienda hacer uso de únicamente tres dientes de ajo para poder disfrutar del excelente sabor de este pan, sin la necesidad de exagerar o de perder ninguno de los sabores al unirlos. Sólo necesitas:
- Pan baguette.
- Mantequilla ablandada
- Aceite de oliva.
- Limón rallado.
- Ajo granulado y en dientes.
- Pimienta y acompañantes (queso, perejil y más).
Lo primero que se debe hacer es precalentar el horno a una temperatura de 180°C. De esa forma, podemos asegurarnos de que esté caliente al momento de introducir el pan y ahorraremos muchísimo tiempo. Además, nos permite picar el pan del grosor de un dedo y los ajos de una forma bastante pequeña.
Una vez que estos ingredientes están picados, mezclamos el aceite de oliva, el ajo en sus dos presentaciones, la pimienta y el limón con la mantequilla ablandada, hasta que se pueda obtener una textura bastante suavizada y cremosa para poder untar en los panes.
Después de untar cada uno de los pedazos de pan de forma correcta con la crema de mantequilla, se colocan en una bandeja y se llevan al horno por un tiempo aproximado de 15 minutos, observando claramente hasta que la mantequilla se absorba.
Una vez retirados del horno, se le coloca el perejil sobre la mantequilla derretida y se dejan enfriar para convertirse en un excelente aperitivo que destacarán en tu reunión familiar o en esa increíble fiesta que estás planificando 🙂